La lactancia materna, el vínculo y su impacto sobre la salud mental (Parte 1)

Convertirse en madre o padre de un bebé no es una tarea sencilla, suelen experimentar muchas emociones distintas y a menudo surgen dudas y preocupaciones al respecto. Las madres y los padres y las niñas y los niños se descubrirán y desarrollarán como tales a partir de la experiencia de relación que compartan. Como sabemos, los bebés dependen de sus madres y padres para sobrevivir, pero las experiencias que vivan juntos tendrán también un impacto sobre su desarrollo. Al fin y al cabo, nos desarrollamos como personas a través de la relación con otros. 

En este artículo abordaremos una de las formas de relación más temprana; la alimentación. Hablaremos sobre la alimentación a través de la lactancia materna y la lactancia artificial y su influencia sobre el vínculo. Sobre todo, reflexionaremos sobre el impacto de la lactancia y el vínculo en el desarrollo psíquico del bebé y la salud mental de las madres.

Ante todo, es importante recordar que no hay una única forma adecuada de ser madre o padre y no sé trata de juzgar cuál está bien o mal. La complejidad, las dudas y el conflicto forman parte de las relaciones que establecemos.

*Este artículo se centrará  sobre todo en la lactancia materna, por lo que en la mayoría de ocasiones se mencionará exclusivamente a las madres. Sin embargo, en la lactancia artificial contemplamos la figura del padre.

 

Vínculo y alimentación

Como mencionábamos, la alimentación es una de las formas de relación más temprana. Se trata de algo más que una fuente de nutrientes, también es una de las primeras maneras que el bebé y la madre tienen para relacionarse y desarrollar los primeros vínculos. Como adelantábamos, el psiquismo y la salud mental de las personas se organiza en un contexto de relación entre el bebé y su cuidador/a. 

En la etapa más temprana de su vida, el bebé se alimenta a través de la lactancia. El contacto, las caricias, las sensaciones y las palabras que acompañan a la lactancia permiten crear emociones y sentimientos en ambas direcciones. Estas experiencias vividas durante la lactancia formarán también parte del desarrollo psíquico y salud mental del bebé.

Es importante destacar que para establecer el vínculo y el apego entre la madre y el bebé a través de la alimentación, lo importante es la relación afectiva que se cree. Es decir, la posibilidad de proporcionar el amor y la seguridad que el bebé necesita puede desarrollarse tanto con la lactancia materna como con la lactancia artificial. Por supuesto, la alimentación no será la única forma de desarrollar el vínculo, este se irá desarrollando de diversas formas y momentos.

 

Lactancia materna (LM) y vínculo

Entre las distintas formas de lactancia, La OMS recomienda la materna como una de las más eficaces para garantizar la salud y supervivencia de los niños. Describe la leche materna como un alimento que contiene los anticuerpos que protegerán al bebé de enfermedades y que aportará toda la energía y nutrientes necesarios. 

Además de los beneficios físicos como el fortalecimiento inmunológico, el desarrollo adecuado del sistema digestivo y la prevención de enfermedades, los estudios indican que la lactancia materna favorece el vínculo entre madre y lactante. Durante la lactancia materna, se liberan hormonas como la oxitocina, también conocida como la «hormona del amor», que promueve sentimientos de calma y apego emocional tanto en la madre como en el bebé. Este contacto íntimo y la interacción física entre ambos generan una sensación de seguridad y confianza, lo que contribuye al desarrollo de una salud mental saludable en el futuro.

Sin embargo, a pesar de ser un proceso natural, no siempre es fácil. A menudo surgen dificultades tanto físicas como emocionales que dificultan el proceso. Por ello, es posible que se necesite asesoramiento y ayuda para iniciar y mantener la lactancia. Es recomendable acudir a servicios de asesoramiento cualificado para recibir apoyo e información que vele por el bienestar de la madre y del bebé. También se recomienda acudir desde el embarazo a grupos de crianza, lactancia o posparto para aprender de las experiencias de otras madres y sus bebés.

 

Beneficios de la LM para la madre

La OMS señala los beneficios sobre la salud física y mental de la lactancia materna para la madre. Entre los beneficios físicos, señalan que las mujeres que amamantan presentan un menor riesgo de padecer cáncer de mama y de ovario.  

Los estudios también destacan los efectos positivos en la salud mental de la madre. Los resultados reflejan que las mujeres que amamantan presentan una disminución en los niveles de estrés y una mayor sensación de bienestar. La liberación de hormonas durante la lactancia, como la oxitocina y la prolactina, promueven la sensación de calma. Además, en un contexto adecuado, amamantar puede proporcionar un momento de tranquilidad y de emociones positivas para la madre, permitiéndole descansar y recuperarse mentalmente de las demandas diarias.

 

Beneficios de la LM para el bebé

Del mismo modo, la OMS refiere que las niñas y niños que han sido amamantados muestran mejor desempeño en las pruebas de inteligencia y son menos propensos al sobrepeso o a la obesidad y a padecer diabetes en el futuro. En la misma línea, diversos estudios señalan que muestran mejor visión, mejor habla y mejor desarrollo general de las habilidades físicas y mentales. También destacan la contribución al desarrollo emocional saludable.